Preguntas Frecuentes.
La planta de cannabis, es una especie vegetal milenaria a la cual se le atribuyen propiedades terapéuticas y medicinales, basadas en evidencia científica que sirven como coayudantes dentro del tratamiento y control sintomático de múltiples patologías y condiciones de salud.
El Tetrahidrocannabinol - THC y el Cannabidiol -CBD hacen parte de los más de 100 componentes cannabinoides de la planta del cannabis, y son los dos más estudiados.
La principal diferencia entre el TCH y el CBD, es que el THC es el componente psicoactivo, mientras que el CBD no tiene efectos psicoactivos. Esto hace que, dependiendo de la patología, se deba formular una mayor concentración de alguno de los dos, o entre otros casos, se requiera de ambos.
La principal diferencia entre el TCH y el CBD, es que el THC es el componente psicoactivo, mientras que el CBD no tiene efectos psicoactivos. Esto hace que, dependiendo de la patología, se deba formular una mayor concentración de alguno de los dos, o entre otros casos, se requiera de ambos.
El olor particular de la planta del cannabis, no viene de los cannabinoides sino de los terpenos de la planta. Los terpenos, se encuentran en muchas otras plantas como la lavanda y el pino y son los encargados de darles su aroma particular.
El cannabis medicinal, reduce los síntomas y ayuda a mejorar la calidad de vida de la persona que recibe el tratamiento.
Es muy importante contar con el acompañamiento de un profesional de la salud, que esté entrenado en la prescripción ética, responsable y segura del cannabis medicinal, quien determinará si la persona es apta para esta opción de tratamiento.
Las patologías, que cuentan con mayor respaldo científico para tratamiento a base de cannabis medicinal son: dolor crónico, epilepsia, trastornos de ansiedad, depresión, nauseas asociadas a quimioterapia, falta de apetito asociada a VIH/SIDA, trastorno de estrés postraumático (TEPT), párkinson, esquizofrenia y esclerosis múltiple.
El cuerpo humano, cuenta con un sistema endocannabinoide de comunicación celular que está compuesto por receptores cannabinoides, cannabinoides endógenos y enzimas que mantienen al organismo en equilibrio e impacta múltiples funciones fisiológicas como el sueño, el estado emocional, el dolor, la piel, el comportamiento psicomotor, el desarrollo óseo y los sistemas digestivo, cardiovascular, inmunológico y cerebral. Por lo que, el cannabis medicinal actúa dentro de este sistema ayudando a regularlo.
Una fórmula magistral, es un preparado o producto farmacéutico que busca atender la necesidad de un paciente particular. Estos son productos únicamente pueden fabricarse y comercializarse bajo prescripción médica y solo pueden ser fabricados por un laboratorio que cuente con una certificación de buenas prácticas de Elaboración (BPE), otorgada por el INVIMA.
En Colombia se han venido comercializando productos fraudulentos, que no cuentan con la aprobación de las autoridades públicas y que pueden causar daños en la salud. Por lo anterior, el Invima ha declarado alertas sanitarias, para evitar esta comercialización indebida. Se recomienda siempre estar alerta a la legalidad de los productos medicinales con cannabis y verificar que sean producidos según la regulación aplicable.
La apertura regulatoria del cannabis, ha sido inminente en muchas regiones del mundo en los últimos años. Sin embargo, cada país cuenta con un marco legal particular.
La Ley 1787 de 2016 reglamentó el uso del cannabis con fines medicinales y científicos en Colombia, creando un marco regulatorio que permite el acceso seguro e informado a estos productos en todo el territorio nacional. Posteriormente, a través del Decreto 613 de 2017 y otras resoluciones complementarias, este marco regulatorio se ha ido robusteciendo para garantizar productos de la mejor calidad.
La regulación en Colombia permite la siembra, cultivo, producción, fabricación, adquisición, comercialización, distribución, importación y almacenamiento de estos productos.
La industria del cannabis medicinal en Colombia, está regulada y controlada por cinco entes de control: Ministerio de Justicia y del Derecho, Ministerio de Salud y Protección Social, Instituto Colombiano Agropecuario (ICA), Invima y Fondo Nacional de Estupefacientes (FNE).
La regulación en Colombia permite la siembra, cultivo, producción, fabricación, adquisición, comercialización, distribución, importación y almacenamiento de estos productos.
La industria del cannabis medicinal en Colombia, está regulada y controlada por cinco entes de control: Ministerio de Justicia y del Derecho, Ministerio de Salud y Protección Social, Instituto Colombiano Agropecuario (ICA), Invima y Fondo Nacional de Estupefacientes (FNE).